Noviembre con V de "vacaciones"
Recién comenza el penúltimo mes del año y quiero que hablemos de un hito clave para la productividad de todo emprendimiento: las vacaciones. ¡Pero si faltan dos meses para enero!, escuché por ahí... Tranqui, esa es la mejor noticia pues es ahora el momento en que puedes planificar con tranquilidad y de forma estratégica cómo será el descanso de todo el equipo.
Si pues. Si hablas de que "todo el equipo trabaja unido" entonces también preocúpate que todos descansen con la misma o más intensidad. No los revientes. No te revientes. Dosifica todo el año para que esas dos semanas, o lo que sea, signifiquen una pausa y no el preámbulo del infierno que te podría esperar al regreso.
¿Qué hacer? Te comparto 4 claves que también comenté en radio hace unos días para que organices por estos días y muy bien tus vacaciones y la de tus colaboradores.
- Debes entender que nadie (incluye los y las "naiden" y "nadiennn") en tu equipo es indispensable para que la empresa funcione al 100%. La cultura de trabajo debe ser sin secretismos y las vacaciones es un buen momento para probar cómo funciona el buque sin tí. ¡Delega! Pero con orden y con tiempo...
- Levanta la información que refleje "el mundo ideal" de las vacaciones que todos quieren, para luego negociar el calendario de fechas para intentar que ese ideal se cumpla. Ojo con los que llevan menos de un año de contrato: ¿Y si facilitas sus vacaciones para no hacer diferencia?
- Preocúpate de la calidad del descanso que tendrás tú y también tus colaboradores: ¿se desconectarán realmente? Que no te de lo mismo si usan sus vacaciones en cualquier cosa menos en descansar. Y por cierto, ayúdalos a ese descanso: nada de llamadas, mails ni emergencias ¿ok?
- Las "lucas" nunca alcanzan y menos en tiempos de crisis e incertidumbre, pero intenta que ello no sea la razón para unas malas vacaciones: ¿Y si los ayudas? ¿Si les das un adelanto en cuotas que paguen en los próximos meses? Sería un gran gesto que te traerá más productividad cuando regresen con un bronceado envidiable y la piel salada.
Hazme caso: no hablen de vacaciones la última semana de diciembre o comenzando enero, ni se te ocurra planificar las tuyas sin considerar las del resto. Y mucho menos que se te ocurra quedarte sin el merecido descanso tras un año heavy y otro que exigirá el máximo de tu equipo para salir adelante. ¿ok? ¡Choca esos puños conmigo!
¡Nos vemos en la playa! (con música ad-hoc)